sábado, 19 de junio de 2010

Qué he aprendido?


Es lógico que una persona no deja de aprender día con día, sin embargo, creo que es curioso conocer lo que una Musa de Papel puede aprender en 27 años.

No puedo escribirlo todo. Igual no creo recordarlo, pero puedo resumirlo.

Rescato lo que la vida ha entregado envuelto en seda hacia mis manos de la manera más dulce y delicada o restregado en la cara groseramente como concreto endurecido para que nunca lo olvide. Desde dulces palabras hasta dolorosas patadas.

Sé que no soy la única que ha vivido lo que acá detallo, pero simplemente deseo recopilarlo según mi visión al día de hoy.

Hace 27 años aprendí a sobrevivir y a simplemente, ser. No puedo olvidar que cada día debo de vivir por que a eso vine a éste mundo

Hace 26 años aprendí a caer para poder caminar y seguir un duro y divertido camino que se llama vida.

Hace 25 años aprendí a decir mis primeras frases y que ellas fueran entendidas. Tengo necesidades y necesito gritarlas, pero también he aprendido a callar y ocultar mucho de lo que siento.

Hace 24 años aprendí a que definitivamente mi familia es lo más importante en mi vida y aprendí que necesito de ellos igual que del aire para poder vivir.

Hace 23 años aprendí a desarrollar mis conocimientos de forma incipiente. A partir de ellos puedo desarrollar mis ideas, verlas crecer y madurar.

Hace 22 años aprendí a que la vida está compuesta de etapas y aunque a veces no sea de nuestro agrado encasillar nuestra permanencia en esta vida, de esta forma, existirán algunas que son inevitables.

Hace 21 años aprendí a que aunque no sepas bien que es lo que haces en la vida o porqué lo haces, en algún momento lo entenderás. Tarde o temprano...

Hace 20 años aprendí que las heridas profundas pueden sangrar y que de vez en cuando necesitarás de una sutura para que la hemorragia se detenga.

Hace 19 años aprendí que el piso debajo de tus pies se mueve en algún momento y que deberás entender que esas sacudidas son necesarias para acomodar las ideas tuyas y las del mundo entero.

Hace 18 años aprendí a que puedes fantasear cuanto quieras, vivir entre estrellas y jugar con tus sueños, eres libre de hacerlo y nadie te lo negará. Eres la reina de tus ilusiones.

Hace 17 años aprendí que el dolor de una separación nunca lo olvidarás, pero sólo el tiempo enseña a que éste, no es eterno y que algún día entenderás porqué está escrito que debemos sufrir. El momento más oscuro de la noche, siempre está justamente antes del amanecer.

Hace 16 años aprendí a no confiar plenamente en mis instintos. Éstos pueden fallar justamente cuando menos los esperaba, pero también me quedó de enseñanza que no siempre que fallen será para que pase algo malo. He de tropezar en el camino, es inevitable.

Hace 15 años aprendí a no mentir (aunque no lo aplique en muchas cosas). Cada una de las mentiras te han de doler hasta el día de hoy y lo peor será cuando te quieras arrepentir y sepas que no hay vuelta atrás. Aunque una mentira de igual forma te pueda salvar la vida.

Hace 14 años aprendí a nunca olvidar a mi pequeña yo. Aprendí que la infancia me dejó sabores y sensaciones incomparables que he de recordar por siempre y, porqué no? vivirlas cada vez que la oportunidad se presente. Nunca dejaré de tener cerquita de mi corazón esa pequeñita.

Hace 13 años aprendí que hay un mundo por explorar más allá de las fronteras conocidas. Y que deseo explorarlo! Mi instinto me pide explorarlo y lo haré!

Hace 12 años aprendí a que hay ciertas cosas que no se hicieron para nosotros. Lo que es para nosotros llega sin esfuerzo, lo que no, por más que luches nunca llegará!! Así es el destino, una mano de cartas desconocidas!

Hace 11 años aprendí que las personas llegan y se van de tu vida a cada instante, pero quienes menos pienses, en los momentos menos esperados, pueden llegar a ser esa familia que tienes derecho a escoger. Esos son esos amigos, los que llenan tu corazón a cada instante y en quien puedes entregar tu confianza ciegamente. Eso también, sólo el tiempo te puede dar la respuesta de quienes son.

Hace 10 años aprendí que dejar las cosas que llenan tu espíritu de lado, es imposible... Cuando "ese algo" es alimento de tu alma, siempre estarás hambrienta de más. Sólo hay que transformarlo para saciarse y ser feliz!

Hace 9 años aprendí a que el dolor llega en cualquier momento. A morir y revivir en instantes. A entender a que a pesar de que muchas buenas personas rodean tu vida, en el camino siempre estarás descalzo y solitario, es una vía en donde sólo tu puedes caminar, los demás van paralelos a ti y nadie puede evitar que tropieces con las piedras de tu camino. Fíjate por dónde caminas!! (no tenemos un botón de "reset" para olvidar al instante, sólo el tiempo cura el dolor)

Hace 8 años aprendí a reconocer cuan feliz puedo ser al escuchar una canción, ver un hermoso paisaje o robar un inocente beso. Todos pueden ser igual que un libro abierto ansioso por ser leído, que me brindará un sin número de sensaciones, cada una de ellas únicas e incomparables.

Hace 7 años aprendí a que siempre después de realizar un gran esfuerzo por algo que ansias con todo tu corazón, existirá una recompensa. Y será tu mayor satisfacción saber que lo has conseguido.

Hace 6 años aprendí a que siempre dudaré ante todo y que es humano hacerlo, así como es humano cometer errores los cuales te harán perder el tiempo. De paso, nadie sabe... tal vez este tiempo perdido te sirva para recargar baterías y arrancar con más ganas de vivir.

Hace 5 años aprendí a trabajar. A dar lo mejor de mí y a tener la gran satisfacción de poder saborearlo, sí.. he de decirlo... a saborearlo igual que una cerveza que se toma en día de calor o a fumar un cigarro que te hace perderte en su humo cegador.

Hace 4 años aprendí a amar y a sufrir por amor. A disfrutar las dulces mieles de la felicidad que te produce ese ser deseado o a sentir la hiel que genera la amargura que afecta tu corazón destrozado al sentir soledad o traición.

Hace 3 años aprendí a no sentir vergüenza y simplemente dejarme llevar por el momento. Sea cual sea la naturaleza de la situación aprendí a ser yo misma y a no avergonzarme por lo que soy. Estoy orgullosa de eso!

Hace 2 años aprendí a expresarme sin buscar excusa. A hablar con las palabras correctas. A tener la valentía de decirle a una persona que es lo que desea mi corazón. A no sentir que soy inferior que nadie, porque simplemente tengo las armas y la belleza para hacer lo que quiero.

Hace un año aprendí que mi fuerza es mayor de lo que siempre pensé (y no estoy pensando exactamente en lo físico). Hoy sé que puedo llegar a un punto en que cuando me harte de una situación, puedo salir de ella de un minuto a otro o puedo seguir llenando mi alma de dolor hasta donde yo quiera llegar, hasta donde mi naturaleza me pida llegar.

He aprendido a ser feliz y a sentir tristeza.

La respuesta es: Con todo esto, aprendí que me he convertido en mujer.

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